Lesión de Aquiles: todo lo que necesitas saber en minutos
¿Te duele al pisar o sientes un chasquido justo detrás del talón? Es probable que estés frente a una lesión de Aquiles. No es cosa rara entre corredores, futbolistas y cualquiera que haga saltos frecuentes. Aquí te explico de forma clara qué la causa, cómo reconocerla y qué puedes hacer para volver al juego sin complicaciones.
¿Por qué se da la lesión?
El tendón de Aquiles conecta el músculo de la pantorrilla con el hueso del talón. Cuando lo sobrecargas –por entrenamientos intensos, cambios bruscos de velocidad o falta de estiramiento– el tejido se irrita y puede romperse parcial o totalmente.
Los factores más comunes son:
- Entrenamiento excesivo sin periodizar.
- Calzado inadecuado o desgastado.
- Falta de flexibilidad en la pantorrilla.
- Superficies duras (asfalto, cemento).
Incluso una ligera torcedura al bajar escaleras puede iniciar el proceso si ya tienes debilidad previa.
Síntomas que no puedes ignorar
Si sientes alguno de estos signos, detente y evalúa:
- Dolor punzante justo encima del talón al correr o saltar.
- Rigidez matutina que mejora con movimiento suave.
- Chasquido audible cuando el tendón se estira.
- Hinchazón leve y sensación de calor.
En casos graves, el dolor persiste incluso al estar sentado o al caminar despacio. Eso indica una rotura parcial o total y requiere atención médica inmediata.
Primeros pasos para el tratamiento
Lo primero es reposar. No sigas entrenando; dale al tendón tiempo para no empeorar la lesión. Aplica hielo 15 minutos cada 2‑3 horas durante los primeros dos días para reducir inflamación.
Luego, usa una toalla o férula de apoyo que mantenga el pie en posición ligeramente flexionada (30‑45 grados). Esto alivia la tensión mientras cicatriza.
Si el dolor no baja después de 48 horas, agenda una cita con fisioterapeuta o médico deportivo. Ellos pueden ordenar una ecografía para confirmar el grado de daño y decidir si necesitas terapia física intensiva o, en casos extremos, cirugía.
Rehabilitación práctica
Una vez que el dolor agudo disminuya, comienza con ejercicios suaves:
- Eccentric heel drops: Apóyate en un escalón, baja lentamente el talón y sube usando la otra pierna.
- Estiramiento de pantorrilla contra la pared 15‑20 segundos, 3 repeticiones diarias.
- Masaje con pelota de tenis bajo la planta para mejorar circulación.
Progresa gradualmente al agregar resistencia y movimiento lateral. No te apresures; el tendón necesita entre 8 y 12 semanas para fortalecerse por completo.
Cómo prevenir una recaída
La prevención es clave: cambia de calzado cada 500‑600 km, incorpora siempre un calentamiento que incluya estiramientos dinámicos, y varía la superficie donde entrenas. Un día a la semana haz entrenamiento cruzado (natación o bicicleta) para reducir el impacto repetitivo.
Escucha a tu cuerpo. Si sientes molestia leve, reduce la carga antes de que se convierta en lesión seria.
Con estos consejos podrás identificar a tiempo una posible lesión de Aquiles, tratarla adecuadamente y volver al deporte con seguridad. ¡A entrenar inteligente y sin dolor!
Jayson Tatum cae en Playoffs: lesión grave y alarma en los Celtics por posible rotura de Aquiles
Jayson Tatum, estrella de los Celtics, salió en silla de ruedas durante el cuarto partido de Playoffs ante los Knicks tras una posible rotura del tendón de Aquiles. Su baja podría cambiar el rumbo de la serie y la temporada de Boston, dejando al equipo y a los aficionados en vilo.