Lo buscaron durante un año y medio. Cayó en la puerta de un partido. Kevin Ariel Torres, señalado como jefe de la barra brava de Platense, fue detenido cuando intentaba ingresar al Arsenal de Sarandí para el cruce de Copa Argentina entre General Lamadrid y Lanús. Llevaba más de 18 meses prófugo y arrastraba un pedido de captura activo por más de dos años.
Según el operativo, personal de APREVIDE y del programa Tribuna Segura —que depende del Ministerio de Seguridad y conduce Franco Berlín— lo detectó cuando quiso entrar con el grupo de simpatizantes de Lamadrid. Un agente del sistema de admisión lo reconoció a distancia y avisó a la policía. Cuando un efectivo de la Comisaría 2ª de Avellaneda se acercó para arrestarlo, Torres lo golpeó dos veces en la cara, saltó los molinetes y corrió hacia el interior del estadio. No llegó lejos: más tarde lo hallaron escondido detrás de un tanque de agua en las instalaciones y lo redujeron.
El operativo y la captura
La maniobra fue simple y efectiva: control de acceso, cruce de datos y reacción rápida. Tribuna Segura trabaja con la verificación de identidad en los ingresos y un padrón de personas con derecho de admisión, prohibiciones o pedidos de captura. Ahí apareció el nombre de Torres. El resto fue coordinación con APREVIDE, que tiene jurisdicción en la provincia de Buenos Aires para prevenir hechos violentos en espectáculos deportivos.
Torres se movía con la barra de General Lamadrid, que, según la investigación, lo cobijó en su circuito de viajes y entradas para evitar controles. Esa red de hospitalidad entre barras no es nueva: se repite en fechas de Copa Argentina y en partidos en canchas neutrales, donde se mezclan tribunas y se confunden banderas. Esta vez, el filtro funcionó.
Tras la detención, el referente de la hinchada de Platense quedó a disposición de la justicia. En paralelo al pedido de captura preexistente, podría enfrentar cargos por lesiones y resistencia a la autoridad por la agresión al policía y el intento de fuga en el acceso. También se evaluará si violó medidas de restricción y el derecho de admisión.
- Dónde fue: estadio de Arsenal, en Sarandí (Avellaneda), sede neutral de Copa Argentina.
- Quién actuó: APREVIDE y Tribuna Segura, con apoyo de la Comisaría 2ª de Avellaneda.
- Cómo cayó: lo identificaron en el acceso; escapó saltando molinetes; lo hallaron oculto tras un tanque de agua.
- Situación judicial: pedido de captura vigente hace más de dos años; ahora queda bajo la órbita de la fiscalía y el juzgado interviniente.

Quién es y qué viene ahora
Torres es señalado como uno de los líderes de la barra de Platense, el club conocido como El Calamar. Su nombre aparece en expedientes desde al menos 2018, cuando saltó en una causa en la que se detuvo a Alejandro Acosta, alias “Viejo Tom”, investigado por un secuestro extorsivo en la Ciudad de Buenos Aires. A partir de ahí, los registros judiciales lo vinculan a hechos como robos, entraderas y asaltos a mano armada.
La mezcla de barras y delito común no sorprende a quienes siguen el fenómeno: las bandas se financian con reventa de entradas, estacionamientos, “peajes” a vendedores ambulantes y, en algunos casos, delitos por fuera de la cancha. La movilidad entre tribunas —hoy con Lamadrid, mañana con otro— les ofrece cobijo y anonimato. La diferencia la marcan los controles coordinados y la posibilidad de cruzar datos en tiempo real.
Para el torneo, el caso deja una señal: habrá más filtros y más ojos en los accesos, sobre todo en partidos con parcialidades numerosas y en sedes neutrales. Con el padrón de impedidos al día y los efectivos con fotos actualizadas, el margen de maniobra se achica. En esta detención pesó algo básico: alguien lo reconoció antes de que pasara el molinete.
En lo judicial, ahora se espera el traslado a sede policial y los pasos de rigor: identificación, informe de antecedentes, notificación de la captura y remisión al juzgado que lo requería. Después vendrán las indagatorias por los hechos que motivaron el pedido de detención y, aparte, por el episodio en Sarandí. La defensa buscará discutir la validez de la identificación y las circunstancias de la aprehensión; la fiscalía intentará consolidar prueba de la agresión al efectivo y del intento de evadir el control.
Para Platense, el caso vuelve a poner a su barra en la agenda. Para el fútbol argentino, deja un dato operativo: cuando Tribuna Segura y APREVIDE trabajan en espejo, los prófugos tienen menos salida. Anoche, esa combinación fue suficiente para sacar de la tribuna a uno de los nombres más pesados del ambiente.